“Ahora, pues, temed a Jehová, y servidle con integridad y en verdad,” Josué 24.143
«Jehová, ¿quién hablará en tu tabernáculo? ¿Quién morará en tu monte santo? El que anda en integridad y hace justicia, Y habla verdad en su corazón.” Salmos 15.1-2
Presentación:
Definición:
Hebreo: (Strong) Completo, moralmente inocente, recto, limpio, perfecto.
Griego: (Strong)(adiaphthoria) Incorruptible, incorrupto, puro y sano de mente.
Cualidad de integro: 1 Que no carece de ninguna de sus partes; 2. Dicho de una persona: recta, proba, intachable. DRAE
La integridad comprende el carácter moral por completo, pero con énfasis especial en la rectitud, en los tratos con otros, la honestidad, y la pureza de mente. El concepto de integridad tiene que ver con ser de una sola pieza (de un solo material) lo que implica que tener integridad es mostrar el carácter de Cristo en todo tiempo y en todo lugar (ser lo mismo siempre, sin doblez, sin tacha).
La Escritura nos enseña que hemos sido justificados (declarados justos, libres de culpa)
gratuitamente (por medio de la gracia, el favor no merecido) por Dios a través de la fe en la obra de Jesucristo en la cruz del Calvario (Ro 3.24, 5.1, 5.9, Ga 2.16). A partir de ese momento, es tarea del creyente buscar caminar en integridad para guardarse irreprensible para el momento en que nos reunamos con nuestro Señor y Salvador Jesucristo (2 P 3.13-14, 1 Ts 3.12-13).
Esta es una tarea de negarnos a nosotros mismos con tal de buscar hacer la voluntad de Dios en nuestra vida, en ocasiones nos hallaremos luchando contra nuestra propia concupiscencia (malos deseos) que nos quieren impulsar a pecar (Stg 1:13-14, 2 Ti 2.22). Dos excelentes ejemplos de integridad en la Biblia son las vidas de José (Gen 37-47) y de Moisés (libro de Éxodo).
En Gn 39 se nos narra que Potifar, alto funcionario de Faraón y capitán de la guardia y quien había comprado a José como esclavo, lo puso al frente de todo en su casa y que la esposa de Potifar lo provocó repetidamente para que pecara contra Dios y que José mantuvo su integridad aun cuando esto le provocó ir a dar a la cárcel al ser injuriado por ella. José expresó “¿Cómo podría yo cometer tal maldad y pecar así contra Dios?» (Gn 39.9).
La historia de Moisés, en este aspecto de integridad, es similar. Hebreos 11.24-26 nos dice «Por la fe Moisés, ya adulto, renunció a ser llamado hijo de la hija del faraón. Prefirió ser maltratado con el pueblo de Dios a disfrutar de los efímeros placeres del pecado. Consideró que el oprobio por causa del Mesías era una mayor riqueza que los tesoros de Egipto, porque tenía la mirada puesta en la recompensa.” Moisés se mantuvo íntegro a causa de la recompensa eterna en Dios.
La Biblia nos dice que solamente aquellos que anden en integridad habitarán en Su tabernáculo y morarán en Su monte santo (Sal 15.1-2). Es tiempo de mantenernos irreprensibles hasta el día de la manifestación gloriosa de nuestro gran Dios y Salvador Jesucristo (Tit 2.12-13).
Reflexión para el grupo de crecimiento:
Comenten los ejemplos de integridad de José (Gn 37-47) y Moisés (Éxodo).
Discutan ejemplos prácticos de cómo “huir de las pasiones juveniles” (2 Ti 2.22)
¿Cómo podemos tratar con la tentación (que proviene de nuestros propios malos deseos)?
Aplicación personal:
¿En qué áreas de mi vida aún no se manifiesta la integridad (en todo tiempo y lugar)?
¿Qué pasos prácticos voy a tomar para mantenerme integro para Dios?
Daniel García
Anciano que preside Consejo Nacional de Ministerios Verbo Guatemala.