JUAN 8:32 Y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres.
GÁLATAS 5:1 Estad, pues, firmes en la libertad con que Cristo nos hizo libres, y no estéis otra vez sujetos al yugo de esclavitud.
Muchas personas no vienen al evangelio, no reciben a Cristo como Señor y Salvador de sus vidas porque tienen temor de perder “SU LIBERTAD” tienen miedo de volverse, según ellos, esclavos de una religión de prohibiciones.
Por medio de la predicación del evangelio las personas son tocadas por el Espíritu Santo, y Cristo viene a la vida de esas personas, y él les da libertad completa de sus pecados, le da libertad de condenación.
Entonces, ¿Cómo podemos vivir verdaderamente la libertad que Cristo nos ha dado? : Comprendiendo que ninguna norma o ley puede cambiar la naturaleza pecaminosa del ser humano (ROMANOS 7:14-16) Que nos digan que algo es prohibido, eso no puede quitar de mi carne el deseo de hacerlo, al contrario, lo vuelve más atractivo. La única forma de cambiar nuestra vida no es por medio de leyes, legalismos o prohibiciones, sino por medio de la libertad para hacer lo correcto que Cristo nos ha dado.
Comprendiendo que el verdadero cristianismo no es de prohibiciones sino de decisiones (1 CORINTIOS 10:23). El cristianismo es la libertad de elegir, con la ayuda del Espíritu Santo, lo que es conveniente y edificante para nuestra vida, para nuestra familia, y para nuestro testimonio cristiano, es la libertad de elegir lo que agrada a Dios y no a nosotros mismos, no porque alguien o algo nos lo prohiba, sino por amor al Señor.
Y por ultimo comprendiendo que la libertad no significa libertinaje (JUDAS 1:4) Tenemos que comprender que ser salvo y tener seguridad de nuestra salvación no significa que vamos vivir en libertinaje, usando la gracia de Dios como excusa para pecar. Libertinaje no es libertad sino esclavitud.
Julio Barrundia
Anciano que Preside Iglesia Cristiana Verbo Álamos